Si aún piensas que estás en el siglo XX espabila y ponte las
pilas, porque los métodos ya han cambiado de forma definitiva. Ahora las
tecnologías de la información y la comunicación son tus mejores aliados para
ahorrarte un buen dinero en la reforma de tu vehículo, y en este artículo te
vamos a demostrar cómo evitar que el pellizco a tu bolsillo sea el menor
posible a la hora de comprar nuevos componentes para tu coche.
El secreto está en esta we
b y en otras similares que hay
por Internet, en las que podrás encontrar casi de todo lo que buscas. Como si
fuera un hipermercado del motor, o una web al estilo de ebay, pero sin
necesidad de pujar en ninguna subasta. Lo que te ofrece esta página web es un
completo buscador con el que podrás encontrar al momento justo la pieza que
necesitas para tu coche, vehículo 4x4 o moto, con la comodidad de poder hacerlo
desde tu hogar y sin tener que estar haciendo llamadas de teléfono ni de
visitar in situ ninguna empresa de desguace.
En la web presumen de que pueden enviar cualquier repuesto a
todos los rincones de España en un plazo de 24 horas. Y eso es así porque
tienen disponibilidad inmediata de miles de recambios usados en stock real,
preparados para enviar al momento en cuanto hagas tu pedido. Si en el buscador
no encuentras la pieza exacta que necesitas, o no sabes su nombre completo, en
cualquier momento puedes plantear una consulta a los profesionales de la
empresa, quienes te atenderán con todo gusto. Por otro lado, es posible que los
pedidos lleguen incluso antes, en un plazo de 24 horas, siempre que el taller
mecánico o el domicilio que indique se encuentren cercanos al centro logístico
desde el que salga la pieza. Pero en cualquier caso la entrega no se demorará
más de 48 horas, para darle toda la tranquilidad que necesita en caso de avería
urgente.
Otro buen motivo para confiar en las empresas de desguace es
que todas las piezas que ponen a la venta están inspeccionadas una por una,
para comprobar que funcionen a la perfección. Y además cuentan con todas las
garantías que aporta la propia empresa. No es lo mismo comprar una pieza de
manos de un particular desconocido, la cual no sabemos en qué estado puede
estar, que comprar una pieza que acaba de ser revisada y certificada por un
mecánico profesional al que no le interesa dejar en mal lugar a su propio
negocio.
La cantidad de dinero que puedes ahorrar renovando tu
vehículo de esta forma es impensable si comparas los precios de segunda mano
con los de los productos nuevos. Es como pararse a pensárselo.